Un fallo en la tienda electrónica puede ser un problema de dimensiones gigantescas. Los fallos del sistema han provocado desde la venta de productos por una fracción del valor correcto hasta la cancelación del lanzamiento de un cohete.
Cuando se trata de un problema en una gran empresa, un fallo provoca pérdidas, pero en el caso de las medianas y pequeñas empresas, pueden incluso significar la quiebra del negocio. En este post repasaremos algunos de estos casos de errores históricos que causaron grandes distorsiones.
A continuación, hablaremos de cómo prevenir estos problemas. Compruébalo:
Daños y perjuicios e invasión de la intimidad
Los bugs ya han causado numerosos daños a las empresas. En mayo de 2017, un fallo provocado por una actualización de software hizo que las cajas registradoras de Starbucks en Estados Unidos y Canadá se cerraran durante varias horas. Las tiendas se vieron obligadas a aceptar sólo dinero en efectivo y a repartir café gratis a los clientes con tarjeta.
Por su parte, GM se vio obligada a retirar 4,3 millones de vehículos. Un defecto en el software del sistema de airbag hizo que el sistema no se activara correctamente cuando el coche sufría impactos.
Y, Walmart pasó por una situación similar debido a un fallo en su tienda virtual brasileña. Miles de internautas compraron ordenadores con un descuento del 75,8% sobre el precio original del producto. En lugar de cobrar R$ 2.398, el sitio web de Walmart sólo cobró R$ 580.
La supuesta promoción duró horas y la empresa canceló posteriormente la venta del producto, desatando la indignación de los consumidores.
Numerosos fallos de seguridad han permitido también el robo de datos de los usuarios. Uno de los casos más famosos fue el robo de datos de usuarios de Yahoo, que afectó a 3.000 millones de cuentas.
Estos datos corroboran un estudio de la empresa austriaca Tricentis, que estima que el coste de los errores de software y los fallos de rendimiento y seguridad en todo el mundo causa un enorme daño a la economía mundial.$ La empresa estima que esta cifra alcanzó los 1,1 billones de dólares solo en 2016.
La prevención es posible
Para evitar este tipo de problemas, es prácticamente imposible confiar en un equipo de empleados. Sería poco práctico para el equipo gestionar todos los sectores, las transacciones y comprobar todo el tiempo si hay un error en la tienda online, por ejemplo.
La mejor opción en este caso es contratar servicios como Testby, que utiliza robots para realizar pruebas rutinarias en los sistemas de los usuarios. En cuanto se detecta un fallo, el sistema envía un correo electrónico al cliente informándole del error.
De este modo, el cliente tiene la posibilidad de resolver el problema rápidamente, evitando que los fallos del sistema adquieran mayores proporciones y causen pérdidas importantes.
Teniendo en cuenta que los fallos se producen constantemente, incluso en las grandes empresas, la mejor opción para evitar un fallo en la tienda virtual es invertir en prevención. No espere a que un fallo en el sistema provoque la venta de un producto agotado o una liquidación a un valor inferior al coste del producto para identificar los puntos débiles de su comercio electrónico. Contacte con Testby y proteja su negocio.